10 Lecciones De Negocios Que No Se Aprenden En La Universidad

Lista de lecciones de negocios que no se aprenden en la universida

Aquí te dejo una lista con las principales cosas relacionadas con el mundo de los negocios que deberías saber pero que muy posiblemente no te hayan enseñado en la universidad. Usa algunos de estos consejos empresariales en tu día a día para mejorar el rendimiento de tu negocio o aumentar tus posibilidades de éxito cuando empieces un nuevo proyecto.

1. Los contactos son clave

Los negocios se basan en las relaciones humanas. Aunque puedas trabajar con distintos socios o proveedores al final acabarás quedándote con los que tengas una mejor conexión. Lo mismo sucede con las personas que contratas. Vas a tener que pasar mucho tiempo trabajando con tus empleados, por ello vas a contratar a aquellos con los que tengas una mejor relación, los que te causen una mejor primera impresión. La importancia que tiene crear una buena red de contactos con los que puedas hacer tratos comerciales o empezar nuevas empresas o proyectos, entre otros, es una de las lecciones de negocios que no se aprenden en la universidad. Céntrate en construir buenas relaciones con las personas que te rodean, nunca sabes cuándo te puede venir bien su ayuda. Ten en cuenta que toma tiempo conseguir un buen nivel de confianza con una persona. Hay un libro muy bueno que te recomiendo leer si quieres mejorar tus habilidades sociales Cómo ganar amigos e influir sobre las personas.

2. Hay que causar una buena primera impresión

Causar una buena primera impresión es muy importante ya que esto tendrá un gran impacto en como esa persona nos ve. La primera impresión crea una imagen de ti en la otra persona que puede llegar a ser muy difícil de cambiar. Por ello es una buena idea empezar cualquier relación con buen pie ya que esto te facilitará crear confianza con esa persona y construir una relación sólida. Tienes que hacerles ver que eres una persona seria que no les vas a hacer perder el tiempo y con la que trabajar va a ser beneficioso para ellos. Muéstrales que tienes ética y que será fácil hacer negocios contigo. Algunas de las cosas que puedes hacer para crear una buena primera impresión son: Llegar a tiempo. Presentarte adecuadamente. Sonreír. Ser buen conversador. Tener seguridad. Ser positivo. Esta es una de las lecciones de negocios que no se aprenden en la universidad y que si consigues dominar te abrirá muchas puertas.

3. Como ser el jefe 

A pesar de que en la universidad se habla de gestión de equipos, de recursos humanos, de cómo conseguir que los trabajadores sean productivos, de liderazgo y de otras cosas por el estilo, nadie te enseña cómo ser el jefe. Si te decides a emprender tú serás el jefe, es decir la gente en tu empresa acudirá a ti no sólo para saber lo que tienen que hacer y en qué dirección va el negocio, pero también para encontrar un referente al que seguir y emular. Se fijarán en ti para determinar cuál es la cultura empresarial que deben seguir, cómo deben comportarse en su puesto de trabajo, cómo de duro tienen que trabajar, o qué reglas éticas deben seguir, entre otros muchos factores. Por ejemplo, si quieres que tus trabajadores estén hasta tarde completando un proyecto importante, tú no puedes irte a jugar a golf después de almorzar y ya no volver. Será clave que les guíes con el ejemplo, no puedes esperar que ellos se comporten de una manera cuando tú estás haciendo todo lo contrario.

4. Balance entre vida personal y profesional

Una de las lecciones de negocios que no se aprenden en la universidad es la dificultad que muchos emprendedores encuentran para combinar su vida personal con la profesional. Cuando estás empezando un negocio quieres tener éxito, quieres que salga bien, por lo que tienes muchas cosas que hacer, y para ello se requiere tiempo y esfuerzo que no vas a poder destinar a otras actividades o personas. No esperes que en la universidad te enseñen que el éxito tiene un precio. Puede que tanto trabajo y sacrificio acaben por pasar factura en tu salud y relaciones personales. Ten en cuenta que tus prioridades y necesidades pueden ir cambiando a lo largo de tu vida, lo mismo que puede hacerlo tu negocio. Así que tienes que asegurarte que consigues un buen equilibrio, es decir que pase lo que pase siempre te reservarás tiempo para tu familia, amigos y tú mismo.

5. Tener buenos hábitos

De poco sirve tener muchos conocimientos y habilidades de negocios si no tienes la motivación necesaria para ponerlos en práctica. El mundo del emprendimiento es muy duro, tan sólo hay que decir que más de ocho de cada diez empresas fracasan durante los primeros 4 años de vida. Lo tendrás muy complicado para estar en el pequeño grupo de emprendedores que lo consiguen, si no tienes la capacidad para animarte a tu mismo a seguir adelante cuando las cosas se pongan cuesta arriba. Tener buenos hábitos de éxito es una de las cualidades clave para un emprendedor. Tienes que desarrollar disciplina, motivación, constancia, perseverancia, pasión, entre muchos otros buenos hábitos. Tener objetivos personales que te guíen en la buena dirección, y la confianza en ti mismo y en tus habilidades para triunfar es una de las lecciones de negocios que no se aprenden en la universidad.

6. Escuchar

Por mucho que seas el jefe de tu empresa o líder de tu equipo, no lo sabes todo estás trabajando con otras personas, muchas de ellas con más experiencia que tú. No quieres acabar hablando por hablar sin nada que decir. Así que es importante que a veces dejes de dar órdenes a todo el mundo, te detengas por un momento, cierres el pico y escuches lo que los demás tienen que decir. También es bueno para la moral del equipo que vean que el jefe les respeta y escucha lo que tienen que decir. Además te darás cuenta de que la gente con la que trabajas puede aportar a tu empresa mucho más valor del que pensabas. Escuchar las ideas y opiniones de otras personas no quiere decir que tengas que aceptarlas automáticamente. Lo único que quiere decir es que eres receptivo a nuevas oportunidades que pueden mejorar tu negocio. Anima a la gente a que compartan lo que piensan y luego escucha atentamente y discute con ello en más detalle para ver si lo que proponen es algo que podría interesarte. Ser receptivo con las ideas y opiniones de otros es una de las lecciones de negocios que no se aprenden en la universidad. 

7. Se aprende con la práctica

Del mismo modo que no se puede aprender a nadar leyendo un libro de natación, es muy difícil que te conviertas en un crack de los negocios tan sólo estudiando. Tienes que pasar a la acción y poner lo aprendido en práctica. Cuando ves a alguien que ha conseguido triunfar en los negocios hay que tener en cuenta que esta persona posiblemente haya estado trabajando duro durante años aprendiendo de sus errores y perfeccionando sus habilidades y conocimientos. Da igual en que punto de tu carrera o aventura empresarial te encuentres, nadie lo hace perfecto la primera vez. No te preocupes si cometes errores, es normal, todo el mundo lo hace. Si las cosas te salen mal al principio, no lo veas como un fracaso sino como una lección. Aprende qué es lo que has hecho mal y acuérdate de no repetirlo.

8. El mercado cambia muy rápidamente

A pesar de que en los cursos de empresa te advierten de que tienes que conocer a tus clientes y competencia para poder adaptarte a sus necesidades, nadie te prepara para la velocidad en que las cosas pueden cambiar. Si quieres triunfar en el mundo empresarial vas a tener que ser capaz de moverte rápido, tienes que ser flexible y reinventarte a ti mismo tantas veces como sea necesarios para seguir siendo competitivo. Es importante que sepas cuáles son las necesidades de tus cliente, qué es lo que tu competencia les está ofreciendo y cómo tú puedes encajar en el mercado. Tienes que centrarte en añadir valor a tus clientes. Para ello es clave sorprenderles y aportarles más valor del que han pagado. De este modo les impresionarás y consecuentemente te será más fácil retenerlos. Recuerda que una de las lecciones de negocios que no enseñan en la universidad es que siempre es mucho más difícil hacer nuevos clientes que mantener a los existentes.

9. Se pierde mucho tiempo en cosas innecesarias

Cuando empieces a trabajar en una oficina te darás cuenta rápido de la cantidad de tiempo que se llega a perder con cosas tan poco productivas como los cotilleos, la burocracia, las alianzas personales, o muchas de las reuniones. Verás como llega el final del día y no has hecho ni la mitad de lo que te habías propuesto ya que has perdido muchas horas hablando con gente al lado de la máquina de café, respondiendo emails o en reuniones sobre tópicos que poco tienen que ver con lo que tú haces. Es difícil navegar todo este mundo empresarial con éxito, manteniendo buenas relaciones con todo el mundo y consiguiendo hacer un buen trabajo sin tener que poner horas extra o acabar estresado. Esta es una de las lecciones de negocios que no se aprenden en la universidad.

10. Los números son importantes

Vivimos en la era de la información. Los datos son clave para dirigir un negocio. Por  ello tienes que invertir suficiente tiempo mirando los números de tu empresa para entender lo que está pasando y cómo puedes mejorar la situación. Los números son objetivos es decir te cuentan la realidad tal y como es sin emociones o sentimientos. Eso sí hay que saber leerlo correctamente para extraer concusiones que se puedan usar para mejorar la productividad y los beneficios de tu negocio. Así que usa los números de tu negocio para conocer mejor a tus: Clientes Mercado Competencia Producto o servicios De este modo podrás conocer cómo se comportan todos ellos y de qué manera tienes que actuar tú para ser competitivo en tu industria. Si eres bueno leyendo los número puedes incluso detectar nuevas tendencias que aseguren el futuro de tu negocio. La importancia de confiar más en los números es una de las lecciones de negocios que no se aprenden en la universidad.

By : José Ignacio Taj-Taj